viernes, 24 de diciembre de 2010

Ataque navideño: la derecha no cesa.

En la víspera de la Nochebuena, la derecha comunicacional y política lanzó su último golpe (por ahora). Las postales ofrecidas por los canales opositores (sumado al relato desde las radios, que establecían una equiparación del presente con los sucesos de diciembre de 2001) apuntaron a ensombrecer las fiestas, instalando el escenario de una (supuesta) aguda y generalizada conflictividad social.
Desde sus páginas digitales, la derecha pretendió capitalizar el conflicto desatado en Plaza Constitución por la suspensión de servicios de trenes, enhebrando una secuencia forzada en su narrativa. Un amanuense de “Clarín”, Alfredo Gutiérrez, ofrece una apretada síntesis de la jugada desestabilizadora: “Piedrazos, saqueos y carros hidrantes en Constitución. Okupas, represión y tres muertos en el parque Indoamericano. Incidentes en Villa Lugano. Corte de la 9 de Julio con alambres y autos. Bloqueos de calles a toda hora y lugar. Tomas de terrenos fiscales y privados. Huelga de petroleros en el Sur. Un aborigen y un policía muertos en el Chaco. Aviones que no salen en Ezeiza. Piquetes que piden comida en supermercados. Un chico asesinado en Barracas tras una protesta gremial. Son algunas de las imágenes de un fin de año inesperado, que muestran una acelerada descomposición social y política.” En fin, todo suma a la hora de construir un escenario de catástrofe que no se compadece con la realidad que vivimos los argentinos. (Ponéle, si querés convencer, sacá Chaco y poné Formosa, ¡pelotudo!).
Por su parte, el “brillante” Fernando Laborda (¡qué lindo escribe!, ¿no?) aportó lo suyo desde las páginas (virtuales) de La Nación: “La acción policial, esta vez por tardía y por su imprevisión ante una situación que se venía venir, volvió a quedar en tela de juicio, a apenas una semana de la creación del Ministerio de Seguridad. Entretanto, el Estado quedó otra vez en evidencia por su incapacidad para garantizar un orden público, cuya ausencia, como ha quedado demostrado desde Villa Soldati hasta Constitución, no sólo preocupa a los sectores más acaudalados de la sociedad, sino especialmente a los más pobres.” Y ahí está la secuencia, “desde Villa Soldati hasta Constitución”, la escalada de conflictos en la Capital apunta a señalar la incapacidad del Gobierno nacional para garantizar el “orden”, y el blanco es, obviamente, la ministra Nilda Garré.
Pero, claro, también otra fuente, en la página de Perfil, nos ayuda a entender el juego en que andamos: “Un grupo de 20 jóvenes, todos con gorras y algunos con sus torsos descubiertos, comenzaron poco antes de las 18 a tirar piedras contra la Policía que se encontraba dentro de la terminal de trenes del sur de la Capital Federal. Los incidentes duraron pocos minutos y, luego, se dispersaron. Pero más tarde siguieron arrojando objetos contra policías y guardas de trenes. Antes de ingresar, patearon cabinas telefónicas y destruyeron un puesto de diarios, además de asaltar un camión de bebidas y el local de ropa deportiva Megastore. Fuente: DyN.”
En fin, la pelea está planteada. La derecha genera conflictividad organizada en las calles y los medios hegemónicos la amplifican. El Gobierno nacional propone una audaz e imprescindible política que procura la subordinación de la Policía Federal a la autoridad democrática. Y ahí estamos, pulseando. ¡Fuerza Nilda!

domingo, 12 de diciembre de 2010

Prensa canalla: Canal 26 ataca a Salvatierra

A lo largo de estos días, las personas que han ocupado el predio, pomposamente llamado Parque Indoamericano (poco más que un basural donde nadie corta el pasto desde hace años), han sido fuertemente estigmatizadas por un discurso abiertamente racista, enunciado desde el poder que controla la ciudad de Buenos Aires. El principal promotor de esta descalificación fue, obviamente, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. En este punto vale recordar una cita de Teun Van Dijk: “En esto, las elites tienen un papel y una responsabilidad especiales. Sus discursos no son privados, sino públicos, y pueden afectar a millones de personas. Una palabra racista de un ministro en un titular de un diario puede hacer más daño que miles de conversaciones informales”.
Y es en este marco donde el periodismo de la derecha no ha cesado de construir una “campaña de ley y orden”, reclamando represión contra los llamados “usurpadores”, o más corriente, “los okupas”.
Sucede que en el decurso de esta película, de esta puesta en evidencia de la conflictividad social, hasta ahora latente, y ahora explícita en la Capital, apareció un vocero de los ocupantes, un delegado, Alejandro Salvatierra, que se constituyó como una voz diferente, en representación de los pobres que reclaman una solución para su legítimo derecho de una vivienda digna.
Salvatierra fue entrevistado ayer por Canal 26. Y fue sometido a una secuencia de preguntas que decantaron hacia un formato lindante con un interrogatorio policial. Resulta claro que a los “periodistas” no les interesaba dar a conocer la opinión de Salvatierra, sino más bien, descalificarlo. Esta entrevista no está publicada en la página de Canal 26, por lo que nos limitamos a ofrecer una versión escrita de la captura que hicimos.
-A raíz de lo que planteamos nos invitaron a participar de la reunión. No es ni bueno ni malo, lo que obtuvimos del gobierno de la Ciudad fue que nos dieran lo básico y necesario para poder desarrollar la vida diaria, la atención médica, los baños y eso. En cuanto a la solución de fondo del problema no recibimos nada. Una propuesta del gobierno Nacional que dice que pone las tierras, que el gobierno de la Ciudad tendría que poner el dinero para construir las viviendas, pero el gobierno de la Ciudad no dio respuesta alguna. Quedamos en que el lunes íbamos a ir a una nueva reunión.
-¿Y no es suficiente para ustedes que el gobierno Nacional les de las tierras como para que ustedes puedan construir allí, teniendo en cuenta que para muchísima gente, conseguir un terreno en la Capital Federal o del conurbano bonaerense se hace muy difícil, por cierto? Ustedes obtendrían tierras, más allá que el gobierno porteño se haga cargo o no de la construcción… ¿Eso no les es suficiente, Alejandro?

-Si. La verdad es que estamos esperando la resolución de cada caso. Hay mucha gente que tiene la posibilidad de construir, y no la posibilidad de comprar los materiales. Te digo la verdad, nosotros, muchas son personas inscriptas en los planes de vivienda de hace mucho tiempo. Nosotros estamos dispuestos a dialogar cualquiera de las posibilidades, lo que pasa es que el gobierno de la Ciudad no da respuestas claras, no se define qué es lo que va a hacer.
-¿Y del gobierno Nacional sí obtuviste respuestas claras?

-No. La única propuesta es que ellos dicen que ellos mucho no tienen que ver en este conflicto y lo que pueden aportar es eso.
-Alejandro, ¿a qué te dedicás?

-Yo trabajaba en la construcción. En este momento estoy sin trabajo, pero no es que pasa mucho tiempo que estoy sin trabajo. La construcción es así: termina una obra y empieza otra.
-¿Y dónde vivías hasta que estás instalado allí?

-En Ciudad Oculta.
-¿En dónde? Es decir, ¿vos tenés un lugar donde volver en el caso de que se produzca un nuevo desalojo?

-Si, volvería a una situación complicada, vivimos hacinados, muchas personas en un solo lugar.
-¿Pensás que sería más complicado que la situación en la que estás ahora?

-No. La situación en que estamos ahora es la búsqueda de una mejora en la calidad de vida que tenemos.
-¿Cómo está compuesta tu familia?

-Tengo tres hijos, mi esposa…
-¿Y están con vos, ahí en el parque?

-En este momento no.
-¿Porque pensás que es peligroso que estén ahí?

-Y, si…
-¿Qué pensás que puede pasar, Alejandro?

-Esperemos que nada. siempre tenemos la esperanza de que no pase nada.
-El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, hace un rato dijo en una conferencia de prensa que el parque va a seguir siendo parque. Clarísimo que evidentemente en algún momento van a tener que desalojar el lugar… ¿Vos tenés conocimiento de eso?

-Si. Te aclaro algo, nosotros también queremos que el parque siga siendo parque. Queremos resolver el problema habitacional, no pretendemos quedarnos a vivir en el parque.
-Alejandro, ¿vos estás armado?

-No…
-¿Sabés si hay gente que ahora está en el parque que está armada?

-No, o sea, el parque es grande, hay mucha gente, no podemos garantizar nada.
-Cerca de las 18.30 va a haber nuevamente una movilización de vecinos del parque, de Soldati, de Lugano, obviamente tratando de manifestarse en contra de esa ocupación… ¿Vos tenés miedo de que se produzcan incidentes violentos?

-Planteamos en la reunión de hoy que se tomaran las medidas para que esto no sea una guerra entre vecinos. Nosotros respetamos la manifestación de los vecinos. Sabemos que ellos reclaman que el parque siga siendo parque, y la mayoría son gente pacífica. La verdad es que hay un grupo de incitadores a la violencia, armados, organizados que promovieron la toma del predio a punta de arma. No fue algo espontáneo. ¿Usted se imagina a algún vecino pensando sacar a tiros a alguien de un parque?
-Pero ocurrió…

-Si, pero ¿usted piensa que son vecinos?
-Bueno, se han visto algunas imágenes de gente que está ahí en los edificios que han tirado, lo han manifestado varios ocupantes del parque. Aseguran que vecinos de la Avenida Castañares…

-Si, pero no podemos generalizar y decir ni afirmar que son vecinos que viven en tal lugar. Era una manifestación pacífica hasta que en un momento se convirtió en agresiva.
-Mauricio Macri pidió paciencia durante la conferencia de prensa, ¿vos pensás que se lo está pidiendo a los vecinos, o a ustedes, o a todos?

-Nosotros tenemos la esperanza que se va a resolver de la mejor manera.
-Alejandro, ¿dónde están los terrenos que les ofreció el Gobierno nacional?

-No nos dieron una información clara.
-Vos sabés que temprano llevaron 40 baños químicos, y nuestro compañero dice que los ocupantes se llevaron estos baños a esa especie de parcelas que tienen.

-No salieron del predio. Lo que hicieron los ocupantes fue acercarlos a los lugares donde están. Cada cual tiene la desesperación de tenerlo cerca para poder hacer sus necesidades, pero están dentro del predio.
-Con un conflicto que lleva casi una semana, con tres muertos oficiales, con uno de manera extraoficial, con un montonazo de heridos que están hoy en los hospitales porteños, vos, como delegado de los ocupantes del parque, ¿se arrepienten de algo?

-Pedimos disculpas a los que ofendimos de alguna manera y a los que molestamos tomando el parque… Yo te hago una pregunta a vos ¿Vos creés que alguien se hubiera enterado que toda esta gente no tenía dónde vivir si no hubiéramos hecho lo que hicimos?
-Bueno, el problema habitacional se sabe, hay muchísima gente que está en tu situación y no toma parques como lo hicieron ustedes…

-Por eso mismo pedimos una política habitacional que cambie esto. A veces hay que generar acciones que haga que esto cambie. No se va a resolver con darle viviendas sólo a la gente que está en el predio, porque hay un montón de déficit habitacional en la zona. Hay un montón de gente que sigue viviendo hacinada, pero tiene que haber una política que vaya progresivamente solucionando el problema. Ahora, si vos venís inscripto en una lista desde hace diez, quince años, donde no tenés una solución, donde pasan los gobiernos y te sentís manoseado y no te resuelven nada… Entonces, la gente llega a un punto de desesperación que, juzgar la medida en sí, nosotros no creemos tampoco que sea lo mejor haber tomado el parque. Es una situación que se dio, por el caldo de cultivo explotó de esa manera. No fue organizada, nadie se organizó para tomar el parque, fue una toma espontánea, de uno, otro, otro, otro hasta que se terminó haciendo lo que se hizo.
-Pero quizás, estos mismos vecinos que se están manifestando enfrente, también esperaron muchísimos años para tener su vivienda propia y de un día para otro se encontraron con esta situación frente a sus casas. Y también hay que reconocer que, bueno, es verdad , puede ser que haya mucha gente que está hace diez años anotada en alguna lista para esperar por su vivienda, su tierra. Pero, quizás muchas de las familias que están hoy en el parque, no son esas personas que están anotadas hace diez años. Entonces se daría una situación un poco injusta, ¿vos no creés eso?

-Yo creo que siempre, en todas las medidas como esta, siempre hay cosas justas, injustas, siempre hay alguien que se aprovecha, alguien que quiere sacar ventaja de una situación. Pero si nosotros dejamos que el árbol nos tape el bosque… La real situación es el déficit habitacional y que la gente no tiene dónde vivir. Muchos estuvieron bajo la lluvia, soportando palazos, tiros, trompadas, un montón de cosas. Si fuéramos mafiosos, narcotraficantes, y toda la clase de cosas de que se nos acusa, seguramente los muertos hubieran estado del otro lado. Todos los muertos y todos los heridos son de (los ocupantes de) el predio. Siempre hay quien se aprovecha, pero la realidad es que si esta gente tuviera donde vivir, cuando llovía se hubierha ido… Ya es una situación desgastante, hasta hoy ninguno tiene una certeza de lo que va a pasar, sin embargo no es lindo, no es bueno, no está bien, y no estamos cómodos viviendo en un parque.
-Alejandro, hay algunas versiones periodísticas que estuvieron circulando en las últimas horas que indican que… A ver, ¿A vos te apodan “Pitufo”? ¿O has estado detenido, has tenido antecedentes?

-Sí. ¿Por qué negarlo?
-¿En qué período y por qué motivo has sido detenido, Alejandro?

-Estuve preso por robo. La verdad es que desde que salí hace mucho tiempo empecé a trabajar, construí una vida,  terminé mis estudios, tengo secundario completo ahora. Cumplí mi condena, pagué mi deuda con la sociedad, y hoy lo único que busco es terminar de edificar mi familia y construir mi vida, nada más. No sé a que viene recordar que haya estado preso.
-¿Cuánto tiempo estuviste preso, Alejandro?

-Casi siete años. Los que me conocen saben que estuve preso, saben la clase de persona que fui y la clase de persona que soy hoy. Te cuento: no sólo estoy acampando en un parque, también generé algunas cosas buenas, formé una familia, tengo mis hijos, los crío, los mando al colegio, trabajo honradamente, todos los meses cobro mi sueldo, y traté de reordenar mi vida.
-Te pregunto esto, concretamente, porque algunos pueden pensar que estés vos, en concreto, tratando, de sacar algún tipo de beneficio con esto y estar involucrado en este tipo de beneficio con esto.. Pero, también para vos fue un shock estar, de repente en Casa de Gobierno hablando en una conferencia de prensa. Hace unos días estabas en Ciudad Oculta viviendo hacinado con tu familia, un conflicto de una semana donde hay personas muertas de por medio, y de repente te encontrás hablándole, casi al país… ¿cómo caés en esa realidad?

-Fue todo muy loco. Lamento haber llegado a esta situación. No fue un momento lindo. Nosotros estamos tristes, tenemos gente amiga, compañeros heridos, muertos. La verdad es que no tengo nada que festejar. Me hubiera gustado ir a la Casa de Gobierno porque se solucione, no por estar acampando en un parque y tener que ir a hablar de la muerte de un montón de gente. Hay que analizar un montón de cosas, de por qué estamos en la situación que estamos. La verdad, no tengo nada que festejar.
-Decime, ¿cómo pensás que se puede resolver este conflicto y de la forma más rápida? Porque, conseguir una vivienda para cada una de las familias que están acampando en el parque, para mañana es prácticamente imposible. En el mejor de los casos, si llegan a aceptar esta propuesta, las tierras que ofrece el Gobierno, la construcción seguramente va a ser a un mediano o largo plazo…

-Todo lo vamos a dialogar con todas las personas que están en el predio y vamos a decidir todas las cosas juntos. Si hay algún marco, alguna garantía de resolver el tema habitacional, la vivienda de la gente, nosotros vamos a hacer lo que tengamos que hacer. Lo único que queremos es que la gente tenga una vivienda. Le agradezco a todos, me tengo que ir.
-Una última pregunta ¿Si viene Gendarmería a las 5 de la tarde, que van a hacer?

-Nada. Si vienen y rodean el predio… mejor, ¿qué va a pasar? No nos vamos a estar agrediendo entre vecinos. No es mala onda, hace 6 días que estoy acá, estoy cansado, me duele la cabeza, disculpame. 

miércoles, 1 de diciembre de 2010

La credibilidad de los medios en caída

¿A quién le importa la credibilidad de los medios de comunicación? Obviamente, en principio, debería importar a sus dueños, a quienes los dirigen, y quizás también a los periodistas que trabajan en esas empresas. Después, a todos aquellos que enlazan sus estrategias políticas o de mercado a la comunicación masiva. Y, por último, a las audiencias, a los públicos, los receptores de esa comunicación. Se trata de una cuestión decisiva, dada la importancia que ha adquirido la posibilidad de influir en la opinión pública como núcleo de cualquier estrategia de poder.
Por eso resulta interesante la entrevista que realizó Víctor Hugo Morales por Radio Continental a Federico Aurelio, director de la consultora Aresco, que indagó en la percepción social del papel de los medios en nuestro país y obtuvo algunos resultados llamativos. Por caso, constatar la pérdida de “confiabilidad y prestigio” del periodismo, que durante más de veinte años encabezó esa encuesta, y que este año por primera vez bajó al segundo lugar. Según Aurelio “la institución comunicación/prensa/periodismo” pasó del 25% de aprobación en el 2009 al 18,6% en el 2010. Es decir, el periodismo bajó siete puntos en la consideración social. Al decir de Aurelio: 
“Y, lo que es más impresionante que esta modificación del posicionamiento de los medios de comunicación es el crecimiento de la institución Presidencia de la Nación, que pasó de estar con el 8% de aceptación en el 2009 a casi el 30% en el 2010”. Encabezando las preferencias de la sociedad, claro, en materia de “confianza y prestigio”.
Por cierto, nos resulta más que interesante esta referencia de la consultora respecto de los efectos de la abierta confrontación que los medios hegemónicos libran contra el Gobierno nacional, no leída en términos de mercado sino de aceptación social.
Señala Aurelio: “Esta fue una muestra que se hizo el 24 de noviembre, con un tamaño muestral de 2.337 casos, en el área metropolitana -Ciudad de Buenos Aires más Gran Buenos Aires-, con un margen de error del 2,07%. Ahí lo que indagamos más en profundidad, a partir de los resultados que estábamos obteniendo acerca de la confiabilidad y del prestigio de las instituciones, era sobre los porqué de las posibles variaciones. Fundamentalmente, en el tema del Gobierno nacional y los medios de comunicación, en este marco de conflicto que vienen teniendo hace un tiempo. Y ahí, indudablemente, está influyendo la buena evaluación que en este momento tiene la gestión del Gobierno nacional. Teniendo en cuenta que hoy, post fallecimiento de Néstor Kirchner, se ha llegado a valores de casi 70% de aprobación, o de valoración positiva, de la gestión del Gobierno nacional, en el marco del conflicto con los medios, eso está influyendo en la evaluación de la confiabilidad o prestigio de estas instituciones”.
Parece claro que quienes adoptaron el camino de la “crispación” sufren hoy el efecto “boomerang” y, luego de la muerte de Néstor y del proceso de reflexión y reconsideración colectiva acerca de sus logros, que obviamente se traduce en apoyo a la presidenta Cristina, los medios opositores sufren un fuerte impacto negativo en la evaluación de la sociedad.
Y, también esta encuesta señala un dato interesante de la recepción, en términos de opinión pública, del discurso catastrofista, intimidatorio, de los medios de comunicación. Así lo explica Aurelio: “Aparte, medimos algunas otras cuestiones muy interesantes. Por ejemplo, el nivel de reflejo del humor social que considera la gente que hacen los medios, y ahí la mayoría considera que los medios reflejan un mayor mal humor social que el que existe realmente. Y a su vez me parece que también influye el hecho de que según medimos hay un acuerdo importante de que la Ley de medios y la cuestión Papel Prensa también influyó en la pérdida en la confiabilidad de algunos medios”.
O sea, que la puesta en marcha de un proyecto orientado a la democratización de la comunicación, tal como lo procura la ley de servicios audiovisuales, y la puesta en debate acerca de una regulación de la producción de papel y la investigación sobre  la confusa apropiación de Papel Prensa han contribuido a generar en la sociedad argentina un estado de alerta que comienza a ponerle límites a las estrategias de manipulación de la prensa hegemónica.
Un cambio esperanzador y obviamente silenciado, dado que en nuestro país las empresas que dominan la comunicación masiva no publican estudios acerca de su credibilidad o prestigio en la sociedad. Se limitan, en todo caso, a difundir (cuando son positivos) resultados en materia de rating televisivo, audiencia radiofónica, entradas en sus páginas digitales o venta de ejemplares en la prensa gráfica. Pero nada acerca de su buena/mala aceptación social. De eso no se habla.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Pablo Marchetti: "Nosotros hicimos Barcelona sólo para destruir a Clarín"

Ayer, en la señal de cable “ultra opositora” TN, los espectadores pudimos asistir a una entrevista atípica. Sucedió que Pablo Marchetti, director de la revista quincenal Barcelona, se permitió diferir, desacomodar y aún contradecir a los conductores del envío “Palabras más, palabras menos”, Ernesto Tenenbaum y Marcelo Zlotogwiazda.
Por caso, los entrevistadores quisieron encorsetar a Barcelona en una tradición ligada al humorismo.
Marcelo Zlotogwiazda: Cada vez que se los quiere encasillar, poner en la categoría de una revista de humor, ustedes dicen que es periodismo.
Pablo Marchetti: Hacemos periodismo, claro. Porque
creemos que el periodismo es un relato de ficción armado con elementos de la realidad. Y esa definición cuadra perfectamente en lo que hacemos con Barcelona. (…) A mí hay muchas cosas que me gustan. Respeto mucho lo que significó la revista Humor, me gusta mucho la revista Satiricón, Tía Vicenta tenía grandes cosas, pero no me siento heredero, justamente por esto que te decía, no nos sentimos humoristas, no nos sentimos herederos de esa tradición. Para mí la cosa más importante que pasó en el periodismo, que me pasó a mí como contemporáneo, fue la aparición de Página/12, sin duda que dio vuelta el relato periodístico…
Ernesto Tenenbaum: A nosotros también, imaginate que nosotros estábamos ahí…
Y sí, es un punto interesante el que señala Marchetti, sobre todo si se advierte el periplo de los entrevistadores, desde Página/12 hacia el Grupo Clarín. Una respuesta que incomoda y que, a esta altura del partido, denuncia un cambio de bando.
MZ: En estos días hay un debate en el mundillo periodístico, a partir de declaraciones que hizo Martín García, el titular de Télam. Dijo: “Yo no quiero periodistas profesionales, yo quiero periodistas militantes”. ¿Cómo te parás frente a esa definición?
PM: La definición, en sí, me cae bien. El término periodista militante, es algo que me cae bien. Lo que pasa que imponer periodista militante, me parece una cosa medio jodida. Pero me parece que está bueno asumir el lado militante que tiene esto. Cuando uno se planta para publicar algo, me parece que de alguna manera trata de incidir en la realidad y en la sociedad a la que va dirigido el mensaje ese. Ahora, me parece que uno también es un pelotudo importante si cree que realmente va a cambiar la sociedad con ese mensaje. Me parece que en ese punto, ese equilibrio, haciéndonos cargo que de alguna manera queremos incidir en la realidad, y ver que no vamos a cambiar un carajo, y ponernos como militantes por delante de eso, me parece que no…
¿Un poco confuso Marchetti, no? Pero, al fin, convengamos en el núcleo que dice: ninguna comunicación es desinteresada y siempre procura generar algún efecto. Quizás, no algo tan decisivo como “cambiar la sociedad”, pero sí al menos incidir en el debate público. Y habrá que agregar la cita completa de Martín García: “Los profesionales son como las prostitutas, escriben mentiras en defensa de los intereses de los que les pagan. Los militantes, en cambio, escribimos la verdad al servicio del pueblo. Soy primero militante, después periodista”. Una definición fuerte, que seguro se abre a otras discusiones acerca de los “compromisos” que afectan al “periodismo independiente”.
MZ: Ahora, el periodista militante frente a una verdad que es perjudicial para la causa de su militancia, ¿cómo actúa?
PM: Y, no sé. Habría que aclarar qué clase de militancia. Yo cuando te digo que me cae bien el tema de militancia…
ET: Yo te doy un ejemplo, el asesinato de Mariano Ferreyra. El periodismo militante del que habla Martín García sale a decir: fue Duhalde.
PM: Si, eso es bochornoso. Pero también hay ejemplos de periodismo militante, identificado con el Gobierno, que buscaron otros caminos. Página/12 fue por otro camino.
Bien por Marchetti, que estableció la diferencia entre la operación imbécil construida por 6-7-8 y el pasquín Tiempo Argentino. Bien al reivindicar la línea editorial de Página/12, que apuntó hacia Pedraza y las complicidades de la burocracia sindical.
ET: Vinculado con ese debate, ¿cuándo una noticia o un chiste es desestabilizante, y cuando son simplemente un chiste o una noticia? Ejemplo: Cristina denuncia a Sábat como cuasi mafioso.
PM: Pero eso me parece ridículo. Entiendo que denuncie a Clarín, entiendo lo que tiene que ver con la pelea con Clarín, y hasta te diría que la comparto. Yo diría que Barcelona tiene una actitud, más que quijotesca, cervantiana. No Quijote como personaje sino Cervantes puesto a hacer el Quijote. Cervantes dice que hace el Quijote sólo para destruir las novelas de caballería. Y te diría que nosotros, sin proponérnoslo, pero parafraseando esto, de alguna manera nosotros hicimos Barcelona sólo para destruir a Clarín. No a Clarín como institución como hace el Gobierno, sino el discurso, lo que quiere imponer Clarín de la verdad periodística. Mentirnos y decirnos que el periodismo no es lo que realmente es. Entonces, eso lo entiendo, lo de Sábat, lo de Langer me parece una vergüenza.
Bueno, aquí podemos señalar dos cosas: de una parte, el obvio silencio de los periodistas de TN ante la abierta declaración de Marchetti acerca de las intenciones de Barcelona en su intento de desenmascarar la mentira ofrecida como verdad por Clarín. De otra, la minimización de la agresión que expresan hacia Cristina las caricaturas de Sábat. Digamos: ¿cuándo habrá de dibujar un perfil de Duhalde al cual le crezca desde la nuca el perfil de Magnetto, para mostrarnos el verdadero monstruo bifronte que amenaza a la democracia argentina? O, más jugado, ¿cuándo habrá de ilustrar alguna página de Clarín con la figura de Magnetto orinante y a los líderes de la oposición disputando por beber ese agua bendita, escatologías aparte?
Y sigue Pablo Marchetti:
"Jaime es un chorro, y me parece bien que se publique. Ustedes hacían antes un juego que era muy bueno y le pedían a cada entrevistado que ponga la tabla de posiciones de los gobiernos. Eso me parece interesante como ejercicio para saber dónde se para cada uno y la verdad que esto me parece, por lejos, por escándalo, el mejor gobierno que hay en mucho tiempo en la Argentina. Ahora, eso no quita que Jaime me parezca un chorro, y tantísimas cosas me parezcan nefastas… Y, no, la verdad que no. Me parece bien decirlas."
Y está bien. Marchetti fue al “territorio adversario” y defendió su posición. Barcelona no es una revista oficialista, ni tampoco opositora. Digamos: comenzó como una parodia de la hegemonía comunicacional y, luego, cuando esta disputa se volvió abiertamente política (“Clarín, ¿estás nerviosho?”) descubrió que estaba en problemas, porque ante el salto de escala, en esa lucha, no había neutralidad posible.
No nos gustó la edición apresurada de Barcelona que trató de explotar la muerte de Néstor Kirchner, más allá de los intentos de compensar las demasiadas agresiones con algunos homenajes. Pero, reivindicamos a Marchetti, y a su revista, en su lucha contra la hipocresía y la mentira que gobierna en la corporación mediática.

viernes, 19 de noviembre de 2010

La inesperada reflexión de Nelson Castro.

Hay que verle la carita a la tal Cynthia Hotton -¡cómo le gustan las cámaras, figurar en una maratón junto a Cobos, transpirar y llorar!-, para colegir que es una artista en ciernes. Una víctima, ponele, de su ambición. Como esas chicas que se exhiben buscando fama y después se arrepienten. Y sí, la tal Cynthia es un personaje menor que se juega a una coyuntura de alta exposición pública. Convengamos: es “videogénica”, da bien en cámara, pero la supera la situación. No tiene agallas para conmover denunciando en serio a nadie.
Y, de otra parte, está la hierática santacruceña, Elsa Alvarez, que tenía un secreto guardado y que se prestó a la agresión de los periodistas que le reclamaron una y otra vez que diera nombres. Menos espresiva, claro, pero tan carente, tan inconsistente al fin, como la otra, la Hotton. Son ellas, al fin, la expresión de la “nueva política” que nos regaló la victoria opositora en 2009. Lo que debe preocuparnos es que estas dos mujeres son diputadas nacionales. Dos tipas que votan y deciden acerca del destino de todos los argentinos. Y ahí estamos.
Obviamente, la gran titiritera de este circo fue Elisa Carrió que las empujó a la escena y les dictó el libreto. Y después de esta semana de “dimes y diretes”, de sospechas que quebraron la unidad de las fuerzas de la oposición, que sembraron dudas sobre cualquiera que intentara sostener una negociación política, vale preguntarse quién ganó, después de la “piña” de Graciela Camaño a Carlos Kunkel.
Lo cierto es que, anoche, Nelson Castro (un activista descarado del operativo “presiones”) sorprendió con su balance de la cuestión pugilística:  “Qué episodio lamentable, ¿no? Algunas cosas para reflexionar. Carlos Kunkel es un provocador, sin duda. Y como tal, su actitud es permanente, lamentable, y juega un rol. Dicho esto, debo decir que la conducta de la diputada Camaño ha sido lamentable. Porque, precisamente, ahí está el temple de un político, alguien que es presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales. Y debo decir, además, en el contexto de lo que se escuchó, que esta no fue de las peores provocaciones de Kunkel. Que lo que decía Kunkel, en realidad, es algo ya dicho y que está en el comentario de la calle y de mucha dirigencia política durante mucho tiempo. Así que no fue precisamente esto que dijo Kunkel algo que estuviera alejado de la realidad,  para ser ecuánimes, porque me parece que de esto se trata. Porque lo pongo en otro sentido: qué hubiéramos dicho nosotros si esto lo hubiera hecho alguien del Gobierno. Y, yo le hubiera reprochado y le hubiera dicho: el que lo hizo, si el que lo hizo es el presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, debe renunciar. Más allá de las disculpas. Y yo creo que esto debería hacer Graciela Camaño. Más allá de sus disculpas, yo creo que debería renunciar. Curioso, ¿no?

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Cristina, la historia, y el "efecto Kirchner"

Parece claro, a esta altura, que la “Operación Presupuesto”, montada por la oposición política y mediática, agoniza. Hoy, por fin, la diputada Elsa Alvarez se ajustó a la sentencia nietzscheana (“Dí tu palabra y rómpete”) y “acusó” a algunos funcionarios oficialistas de haberla llamado por teléfono. Y punto.
Pero suceden otras cosas. Digamos: Cristina Fernández ocupa el centro de la escena política y, para sorpresa de algunos, se afirma como Jefa de Estado y depositaria del apoyo de las mayorías.
Entre tantas cosas que se dicen, nos resultó interesante este apunte de Ignacio Fidanza, un periodista abiertamente opositor, referido al discurso de Cristina emitido el lunes pasado por cadena nacional. Luego de explicar la encerrona en que la oposición se encuentra respecto a la discusión del presupuesto, “haga lo que haga, pierde”, Fidanza señala:
Cristina avanzó así en lo que ya se insinúa será el eje de su campaña por la reelección. La exhibición de una mujer moderada, que evita enredarse en peleas como hacía su marido, pero muy firme en sus decisiones. Una mujer de Estado que se dedica a gobernar, mientras la desorientada oposición busca trabar el progreso del país. El libreto no tiene nada de original, pero adquiere un poderosísimo caudal emotivo cuando la persona que lo encarna, viene de sufrir uno de los dolores más grandes que se conozcan. Y acaso en esa situación tan dura pero al mismo tiempo tan fuera de discusión, de artificios, de simulaciones, esté la clave de bóveda de este resurgir de Cristina, que parece haber enterrado para siempre a aquella líder arrogante que interpelaba desde el atril. O quizás siga allí, pero quedará para los intelectuales discutir si cambió la persona o la mirada”.
De otra parte, el programa “Palabras más, palabras menos”, difundió anoche los resultados de los estudios de opinión pública de Poliarquía, subrayando que esta consultora no es contratada por el Gobierno nacional. Los números presentados por Marcelo Zlotogwiazda, bajo el llamativo título “efecto Kirchner”, son elocuentes.




La encuesta revela una intención de voto del 46 por ciento para la presidenta, subiendo nada menos que 15 puntos con respecto a octubre. De acuerdo a este sondeo, si hoy fueran los comicios, Cristina ganaría sin necesidad de ir a segunda vuelta.
Lo llamativo, además de la importante suba oficialista, es la caída al tercer puesto de Mauricio Macri, perdiendo seis puntos, del 21 al 15 por ciento, mientras que Ricardo Alfonsín, en este escenario, sube al segundo puesto.
El legislador radical, si bien perdió dos puntos porcentuales, se ubica con un 19 por ciento, a 25 puntos de diferencia de la Presidenta.
También el referente de Proyecto Sur, Fernando Solanas, perdió cuatro puntos, pasando de 14 a 10 , según este reciente sondeo.
Mientras tanto, Cristina, que no descansa, presidió los festejos del bicentenario de Curuzú Cuatiá, en la provincia de Corrientes. Y dijo:
“Si uno se detiene por unos instantes y mira para atrás, no mucho para atrás, simplemente del 2003 para adelante, para qué acordarse de todo lo otro, y vemos las cosas que hemos hecho en estos siete años, yo estoy segura que cualquier argentino, piense como piense, esté en el lugar que esté, jamás hubiera imaginado que en estos siete años íbamos a poder hacer las cosas que hicimos teniendo en cuenta cómo empezamos. Por eso digo que, cuando uno le pone ganas, cuando uno le pone fuerza, cuando uno no cree que haya imposibles, cuando uno el único miedo que tiene es a la historia… Yo sí le tengo miedo a la historia. Siempre con Néstor le tuvimos miedo a la historia, que no seamos capaces de estar a la altura de las circunstancias. Y a lo único a lo que no le tenemos miedo es precisamente a luchar para trabajar incansablemente contra cosas que parecían imposibles. Ustedes saben que antes de ser presidenta o antes que él fuera presidente, yo fui legisladora, y me acuerdo cuando escuchaba que era imposible hacer esto o lo otro. Que uno no podía oponerse al Fondo Monetario Internacional, que había que votar esto porque si no se caía el país, y porque era imposible… Y nosotros creo que lo que hicimos fue ser el instrumento de la historia para demostrar que se podía tener un país con dignidad, un país que no se arrastrara, un país que fuera tratado de igual a igual, ni mejor ni peor que cualquier otro. Simplemente de igual a igual. Como tuvieron los patriotas, igualdad y libertad, las dos grandes banderas. Y creo que tal vez lo mejor que hemos hecho es reconstruir esa confianza en nosotros mismos”.
En fin, atenta a la mirada de la historia, conciente de la responsabilidad que asume, Cristina avanza.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Soñar...

Hola a tod@s, soy Sandra, la compañera/novia/esposa de Sanín. Mientras él duerme plácidamente, le estoy invadiendo (?) el blog para subir un video que me hizo moquear. Supongo que a muchos de nosotros nos pasa lo mismo cada vez que vemos/leemos/escuchamos homenajes a nuestro querido Néstor. Este video lo armó, con todo el amor, Tani, de Aluvión Zoológico, y acá va.


Una infidencia. Ayer fue el cumple de Sanín, y como no tuve tiempo para pensar qué regalarle, se me ocurrió comprarle algo "simbólico" para luego salir con más tranquilidad. Le compré una bella artesanía tallada en palosanto para sumar a su colección de patos y aves varias. Y me encontré con algo maravilloso que no había visto hasta ahora en ese local que venden objetos tan lindos y que paso  todos los días para ir a tomar el subte D (y siempre me paro a mirar, soy mujer al fin). Son dos pingüinos, uno grande mirando a sus dos crías, y otro, más chico, mirando hacia arriba.
En fin (como dice Sanín), le gustó y se emocionó tanto, que no creo que tenga que salir a comprarle otro regalo...
El video, Tani, buenísimo.
Saludos y perdón otra vez por la "invasión".
Sandra

lunes, 8 de noviembre de 2010

Néstor y Cristina: La lucidez de una mirada.

Sucede que, a veces, la producción de un envío televisivo invita a un protagonista para lograr un efecto que suponen tan previsible como favorable a sus intereses (políticos y mediáticos) y todo sale mal. La referencia apunta al programa “Código Político”, que conducen los muy “cancheros” Eduardo Van der Koy y Julio Blanck, y que emite la ultra opositora señal TN. Así fue que, el jueves pasado, procurando vaya uno a saber qué efecto de sentido que dañara al Gobierno nacional (apuntando especialmente al cuestionamiento del vínculo que unió a Néstor y Cristina), invitaron a Víctor Bugge, jefe del equipo de fotógrafos de la Presidencia de la Nación y, además, único autor de las 800 fotografías que documentaron el velatorio público del ex Presidente Néstor Kirchner.
Vale apuntar que, respecto de la puesta en escena del velatorio se han desarrollado en estos días no pocas teorías manipulatorias, que no eludieron el debate acerca del significado de la foto que ilustra este post, y que fuera la elegida por la prensa opositora para ilustrar sus portadas. ¿Cuál era el mensaje que se pretendía transmitir al elegir precisamente esa foto? ¿La soledad de Cristina o su fortaleza?
Aquí la conversación de su autor, Víctor Bugge, con Blanck y Van der Kooy.
Blanck: La foto del féretro desde arriba, con la Presidenta parada al lado, que estuvo en la tapa de Clarín, la tapa de La Nación y de algunos otros diarios más, supongo, que se publicó afuera. ¿Tenés idea de cuánto dio vueltas?
Bugge: Se publicó en Europa y en Estados Unidos. Se publicó bien la foto. La agencias de noticias la potenciaron mucho.
Van der Kooy: ¿Qué fue lo que te llevó a tomar ese instante? Porque vos sabés que se ha escrito sobre esto…
Blanck: Jorge Fernández Díaz escribió en la Nación una nota excelente.
Van der Kooy: Lisy Smiles, en La Capital, hizo toda una lectura acerca de esa foto, acerca de qué significaba y qué no significaba.
Bugge: A mí como fotógrafo de la política siempre me costó fotografiar la unidad o la coincidencia, si querés.
Van der Kooy: ¿Y eso, por qué?
Bugge: Porque nunca pude fotografiar la unidad en la política.
Van der Kooy: Porque no hay unidad en la política, esto lo digo yo.
Bugge: Yo siempre ví que hubo unidad en el matrimonio, desde cuando Kirchner era presidente hasta que le entregó los atributos a Cristina. Así que la idea era fotografiar a la pareja, al matrimonio. Hay una foto mía que recorre ahora las calles, que es un abrazo en la época del conflicto con el campo, donde prácticamente pasan a ser una sola persona.
Blanck: Se publicó en la contratapa del suplemento que hizo Clarín para recordar a Kirchner…
Bugge: Conociendo la intimidad, sabiendo de esa unidad, yo quise registrarla.
Blanck: ¿Fuiste a buscar esa foto desde arriba?
Bugge: Sí, porque yo lo que necesitaba era obviar a esa cantidad de gente que ya estaba registrada. Entonces, la mirada cenital, la mirada desde arriba, fue la que me permitió definir la situación.
Vale señalar que la intención del artista -aquello que se propuso representar- no clausura el debate acerca de la significación de la obra. (En este caso, una fotografía conmovedora). Ni mucho menos clausura, y ni siquiera roza el debate acerca de cuál fue la intencionalidad de los editores de Clarín y La Nación al incluir precisamente esta foto de Bugge en sus portadas. ¿Qué leyeron allí, en esa imagen? ¿Qué pretendieron comunicar?
Los periodistas de TN mencionan dos artículos referidos a esta fotografía. Uno, el de Jorge Fernández Díaz, tan banal como olvidable. El otro, en cambio, escrito por Lisy Smiles y publicado por el diario La Capital, de Rosario, merece ser leído con suma atención. Una lectura que Van der Kooy no supo realizar en profundidad, y por ello lo elogia. Por caso, se le escapa leer este párrafo de Smiles: “Dentro del mapa político diseñado por el kirchnerismo, los medios de comunicación fueron arrancados por Néstor Kirchner del impoluto limbo virtual para ser arrojados al territorio real. Los K los llevaron a la arena política, a la recuperada plaza pública de la discusión. Dejaron de ser dispositivos virtuales, les pusieron nombre y apellido, caras, contaron las historias ocultas, develaron secretos, los llevaron a la Justicia y los “encuadraron” en un nuevo marco legal para demostrar la ilegalidad”.
En fin, Víctor Bugge, quien trabaja hace más de 30 años en la Casa Rosada, no es un “analista político”, pero sí una persona sensible y políticamente comprometida que se propuso, a través de la práctica de su lenguaje artístico/periodístico, dar testimonio de la unidad, incluso más allá de la muerte, entre Néstor y Cristina. Una unidad que su trabajo logró documentar elocuentemente.
Es lamentable, que el canal ultra opositor TN haya decidido no subir el segmento de la entrevista a Bugge en su página digital. Los demás segmentos, sí están disponibles. ¡Qué curioso!

PD.: Si lo querés ver, está acá.

viernes, 29 de octubre de 2010

No estás sola, Cristina.

Estuvimos en la Plaza y formamos parte de la interminable cola que procuraba llegar a la Casa Rosada. Pero, después de más de siete horas, nos rendimos (estaremos viejos, quizás). O mejor, en verdad, teníamos urgencias que atender en casa.En los diarios que publicarán sus portadas dentro de un rato, es casi seguro que la movilización a Plaza de Mayo en homenaje a Néstor Kirchner y en apoyo a la presidenta Cristina, porque las dos cosas fueron juntas en los gritos del pueblo, habrá de ocupar un lugar central. Se trata de un hecho político de enorme significación, en tanto expresa la respuesta popular a la pérdida de un dirigente que es vivida como una derrota. Y, también, contradictoriamente, la afirmación de una esperanza, de la conciencia de haber asumido un proyecto de país, un voto a favor de Cristina.
En la fila, que se engrosaba inexorablemente, confluía lo heterogéneo y bueno que convoca el kirchnerismo. Una rica mezcla de generaciones, también de identidades políticas, de historias y de inscripciones sociales y económicas muy diversas. Y ahí caminábamos. El canto preferido era, obviamente, “¡Andate Cobos, la puta que te parió! Y luego, su versión irónica: ¡Y llevate a la Carrió!
Pero era infinita la muchedumbre. Nos hizo acordar a las marchas cuando murió Perón, bajo la lluvia. Allí también el campo popular se hizo presente, e iniciaba “colas” que no se sabía ciertamente a dónde llegaban, pero quería estar allí y decir presente.
Habrá que subrayar, para todos los compañeros que no pudieron acercarse a la Plaza de Mayo, que se trató (y se trata, porque continúa) de un ejemplo de movilización democrática. No hubo organizadores ni administradores de esta irrupción de la multitud. Como le escuchamos decir a una compañera *: “Somos nosotros, que nos disciplinamos en nuestra expresión. Aquí no hay peleas, hay sentimiento”.
Pero claro, una vez llegados a casa, buscamos en la red las versiones de esta marcha histórica y encontramos esto:
Y esto:
Bien sabemos cuál es el sentimiento hostil -y aún perverso- que anida tanto en las redacciones del Clarín como en La Nación respecto de la muerte de Néstor Kirchner y hacia el futuro del gobierno de Cristina. Pero, convengamos, en ese aminoramiento mentiroso entre las "decenas" de miles y los "cientos" de miles, los empleados de Magnetto terminan por certificar su renuncia a cualquier resto de veracidad, en su pretensión de trabajar como periodistas y a la vez rendirse ante la patronal, procurando minimizar una movilización que entrará en la historia por su magnitud y elocuencia.
Están asustados, parece.

* 3:16 de la madrugada la vimos -en la transmisión de Visión 7- lograr su objetivo, junto a sus compañeras, rindiendo homenaje al ex presidente. Bien por ella y por todos.

miércoles, 27 de octubre de 2010

¡Gracias Néstor!

El asesinato de Mariano Ferreyra y los tiempos de la derecha mediática

Hay que decir, como reconocimiento a Ricardo Forster, que no sólo juega en el campo amigo de TVR o "6-7-8", sino que también tiene el coraje de jugar de visitante -como lo hizo ayer, martes- en el programa “Palabras más, palabras menos”, enfrentando las mordidas de la jauría y la distorsión de los “zócalos” mal intencionados. Sucede que, más allá del empeño de una fiscal y de una jueza por esclarecer el asesinato de Mariano Ferreyra, los tiempos del Poder Judicial son demasiado lentos para la avidez de la derecha mediática, de la que son parte Tenembaum y Zlotogwiazda. Como era previsible, la investigación se complejiza en el cotejo de declaraciones y refutaciones, videos y pistas, que nadie puede saber en qué habrá de culminar.
Lo cierto es que, en estos días, la derecha trafica con la muerte de un pibe. Y despliega un arsenal de acusaciones que, apelando a la peor manipulación, intenta establecer un vínculo entre los presuntos asesinos y la dirigencia sindical nucleada en la CGT, conducida por Hugo Moyano, que apoya al Gobierno. Un tiro por elevación.
Está claro, a esta altura, que a Ferreyra, un joven militante del Partido Obrero, lo mató la derecha que anida en la Unión Ferroviaria. Desde los medios hegemónicos, se insiste -y se insistirá- en hacer responsable al gobierno nacional de esta muerte. Por aquello de que hay un “clima” discursivo, un “espíritu de confrontación”, supuestamente generado por el oficialismo, que alienta o genera las condiciones para la violencia física, práctica y, al fin de cuentas, criminal, entre otras hipocresías.
Se pretende deslegitimar así, de un plumazo, lo que ha sido, y es, una de las más virtuosas banderas del kirchnerismo, gobernante desde 2003 a la fecha: la valiente decisión de no reprimir las manifestaciones de protesta en los espacios públicos. Sólo desde el cinismo más descarado se puede refutar esta verdad, evidente para cualquiera que recorra las postales de la conflictiva realidad de estos años.
Las fuerzas de seguridad que responden al Gobierno nacional jamás dispararon frente a las movilizaciones políticas y sociales que han jaqueado -¡y cuánto!- la tan mentada “gobernabilidad”. Por el contrario, desde el Estado siempre se procuró encontrar caminos de negociación, se buscaron “consensos” para resolver esas protestas legítimas, o no.
Está claro que en el juego del “péguele a Moyano” se apunta contra el Gobierno. Y se apunta contra el “modelo” económico y social que impulsa el kirchnerismo. Y, obviamente, se intenta construir un clima de opinión opositor de cara a las próximas elecciones.
Es muy evidente la debilidad de la línea argumentativa de la derecha, especialmente cuando tiene que apelar a la exhibición en simultáneo -en las tapas de Clarín, La Nación y Perfil- de ocasionales fotografías del presunto tirador junto a figuras ligadas al kirchnerismo. Es muy forzado el intento de asimilar la trayectoria gremial y política de Hugo Moyano (opositor al desguace del Estado en los años 90) con la de José Pedraza (cómplice y beneficiario de las privatizaciones) para desacreditar al gremialismo argentino en su conjunto. Hay mucha basura mediática, allí.
A la derecha comunicacional, ligada como nunca antes al establishment económico, sin dudas les preocupa el avance de los trabajadores organizados. ¡Qué cosa, ahora pretenden participar de las ganancias de las empresas, según lo establece algún artículo sospechosamente olvidado de la Constitución Nacional! Y les molesta, también, que al interior del peronismo la CGT reclame -como “columna vertebral”- una proporción en la representación legislativa. Y, la pregunta: ¿por qué no?
Frente a esta ofensiva, es obvio que desde el kirchnerismo -esta encarnación del peronismo del cual nos sentimos parte- entendemos que es necesario dar respuesta. Y aquí se instala una discusión, tan rica como urgente. Porque, a veces, en los debates que nos impone una coyuntura, también se van prefigurando las estrategias.
Por caso: es muy evidente la debilidad del intento de ciertos medios que apoyan al Gobierno de enlazar el asesinato de Ferreyra con sectores ligados al ex presidente Duhalde. Un intento vano que jamás llegará a la supuesta cúspide a la que se pretende responsabilizar. En rigor, la discusión es otra.
Tal como señaló el ya citado Forster: Nos cabe a nosotros dar cuenta de ese asesinato cometido por una patota sindical. Le cabe a las instituciones de un estado de derecho avanzar sobre los responsables materiales e intelectuales. Le cabe al gobierno garantizar no sólo que eso se haga con premura sino avanzar sobre algunas de las causas que hicieron posible la masacre de Barracas. Sindicalistas canallas, empresarios explotadores, un sistema que perpetúa la precarización laboral, medios de comunicación que de una manera cínica presentan como héroes y virtuosos a aquellos que, ayer nomás, mostraban como violentos piqueteros que amenazaban la paz social y a los que había que poner un límite”.
Y más allá: es urgente que el Gobierno desmonte, de una puta vez, esa llaga que constituye el sistema de administración de los ferrocarriles. Hay que meter la mano allí, y barrer esa estructura corrupta e ineficiente que castiga a millones de pobres (a los usuarios y a los trabajadores). Este es el desafío que puede acallar a los que ladran, por izquierda y por derecha.

martes, 19 de octubre de 2010

La prensa hegemónica interpela a Scioli

En fin, uno lee y escucha, trata de informarse y entender. Y percibe que avanza, desde la prensa hegemónica (pero no sólo desde allí), un intento de construcción de un “clamor popular” que aboga por una suerte de armisticio en esa confrontación entre “populismo” y “neoliberalismo” (o izquierdas y derechas) que ha logrado exhibir -con más o menos eficacia persuasiva- de cara a la sociedad el kirchnerismo gobernante. Y “el hombre”, acariciado por la brisa de la historia, el que podría cerrar esa herida, acabar con la “división” entre los argentinos, sería, precisamente, Daniel Scioli.
Sobre él convergen dos solicitaciones. De una parte, quienes le reclaman que encabece al llamado Peronismo Federal (o disidente, o no alineado, o menemista) y cierre así, con una derrota elocuente, el ciclo de los Kirchner. De otra, quienes sugieren que, ungido como delfín del actual Gobierno, Scioli podría expandir las fronteras de aceptación popular del “modelo” kirchnerista, incorporando sectores de capas medias hoy renuentes a acompañar con el voto un tercer período.
Digamos, uno puede leer el reclamo por un Scioli francamente opositor en una nota redactada por Eduardo Van der Kooy, editorialista del diario Clarín, referida a “la debilidad política e institucional de los Kirchner”. Ahí se explaya el articulista a favor de la “esperanza blanca” de la democracia construida sobre consensos, sobre esas (pocas) cosas respecto de las cuales todos podríamos ponernos de acuerdo: “Las peores noticias (para el kirchnerismo, claro), sin embargo, provendrían de la política: Daniel Scioli, por primera vez, admitió la semana pasada que podría ser candidato a presidente. Lo hizo a su estilo, en extremo cauto, apenas insinuante. Pero fue mucho para lo que suele acostumbrar. El maullido de un gato pareció transformarse en el desierto político en rugido de un león. Nada indica que el gobernador de Buenos Aires haya recibido alguna venia del ex presidente”. O sea: el tal Scioli va por más, se independiza y se enfrenta, con su estilo cauto, dando maullidos que resuenan.
O, también, uno puede leer lo que afirma Joaquín Morales Solá, desde las páginas de La Nación, alentando esa esperanza: “Scioli no decidió lanzarse confiado sólo en un Dios bueno. Antes cotejó que una inmensa mayoría de intendentes presentes en aquel acto se solidarizaron con él y hasta evaluaron luego la posibilidad de escribir un documento público de adhesión al gobernador. Esos caudillos no se estaban abrazando a Scioli, sino diciéndole adiós a Kirchner. Otra vez, Scioli contra Kirchner como posible jefe de una oposición peronista.
También Mariano Grondona editorializó sobre este tema en el programa Hora Clave, emitido por Canal 26. “Yo noto, por ejemplo, en casa, o en lugares así, como privados, se discute a Scioli, hoy en día. Pero, Scioli si, Scioli no. Y es como el dios Jano, que tenía dos caras, con una cara miraba a un lado y otra cara mirando a otro. Porque hay como dos versiones de Scioli. Están los que dijeron: no, Scioli perdió el tren, no es su momento y cuando debía haber reaccionado no reaccionó. Algunos dicen, es un trapo de piso, entonces ya no podemos esperar más nada de él. Y esta otra cosa, lo del valor de la prudencia… Aristóteles dice que la virtud del político, es lo que llaman en griego kairós; que es la intuición del tiempo oportuno. Sería un dios que nos visita y nos dice: es el momento, no es el momento. Quiere decir que la realidad, que el tiempo, es desparejo. Hoy llueve, mañana hay sol y hay que adaptarse a las variaciones del tiempo político. Lo que parece obvio en un momento, es imposible en otro. Esta es la otra versión de Scioli, que yo creo que se ha ido cotizando…. La derecha, está claro, le formula un reclamo a Scioli: es la hora de confrontar y romper.
En fin, así están las cosas. Los articulistas de la oposición -con enorme trayectoria en la promoción de “soluciones democráticas y populares”, ¿no?- están jugados a la alternativa Scioli opositor, frente a la “crispación” que promueve el kirchnerismo.
Y, en este marco, importa lo que señala Manuel Mora y Araujo, desde el periódico Perfil: Hay una demanda que emerge de la ciudadanía: una síntesis entre lo que hoy se obtiene del Gobierno y lo que podría esperarse en los planos en los que el Gobierno disgusta. Esa demanda ya motorizó el voto que consagró a la Alianza en 1999: se buscaba mantener lo que andaba bien (que, después resultó, que no andaba tan bien) y mejorar lo que la sociedad no quería. La Alianza fue, en ese entonces, la respuesta que buena parte de la sociedad esperaba. Scioli se encuentra, hoy, en el preciso lugar en que podría ser la respuesta a esa demanda -exactamente lo que catapultó a Julio Cleto Cobos al estrellato hace dos años-”. Un tanto ambiguo, ¿no? Pero lúcido a la hora de especular sobre aquello que ronronea (no ruge todavía) al interior del kirchnerismo: Scioli como constructor de una nueva mayoría, sin el lastre K.
Dejamos para el final este sugestivo párrafo de Horacio Verbitsky, en Página/12: “Scioli fue interrogado en una radio (financiada en gran parte con publicidad del gobierno bonaerense) acerca de su candidatura. 'Si tiene que llegar, llegará', respondió luego de argüir que no pensaba en términos personales, sino en ponerle el hombro al país. Un funcionario de primera línea del Poder Ejecutivo sostuvo esta semana que la participación de Scioli en una primaria presidencial, fue acordada con Néstor Kirchner, que de este modo legitimaría su candidatura en una elección tanto o más significativa que la radical, entre el vicepresidente Julio Cobos y el diputado Ricardo Alfonsín. El acuerdo incluiría seguridades, cuya índole no aclaró, sobre la victoria de Kirchner en esa primaria. Uno de los líderes del Frente para la Victoria en el Congreso afirmó que el proyecto de Scioli está más avanzado de lo que se cree y lo resumió en siete precisas palabras: 'Por las buenas o por las malas'. Pero muy cerca de Kirchner nadie cree que Scioli se anime a desafiarlo. La idea predominante es que esa candidatura es una expresión de deseos de Clarín y del filántropo colombiano Francisco de Narváez, quien esta semana confirmó su amistad con Scioli y dijo que no tenía otra diferencia con él que su pertenencia al kirchnerismo, lo cual se parece demasiado a una invitación pública a saltar el cerco.
Más allá de estas operaciones de la prensa hegemónica para lograr que Scioli salte el cerco, es probable que la discusión en la blogosfera nac & pop continúe en torno de aquello que representaría el gobernador bonaerense en tanto relevo del oficialismo, sobre lo que suma o resta, sobre su posible papel en la dialéctica cambio/continuidad, despejada -según pensamos aquí- cualquier expectativa de “superación”. En este punto, la referencia ineludible en estas horas es el posicionamiento firme de Hugo Moyano, que ya mostró los dientes y señaló un escenario de conflicto entre los trabajadores organizados y el “cauto” Scioli. Puestos a elegir, creemos que el “modelo” se defiende con K. Y ahí apostamos.

viernes, 15 de octubre de 2010

Pidiendo oxígeno, Cleto asciende en la Fénix II

A estas horas, ya es sabido que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner informó que ha vetado la llamada “ley del 82 por ciento móvil”, iniciativa que no dudó en denominar “ley de quiebra del Estado”. De donde resulta que el Gobierno nacional demostró -dado lo expeditivo de la respuesta- que sus anuncios previos a la votación no eran una simple “chicana” o presión, sino una decisión tomada, que contemplaba los previsibles costos políticos de esta medida.
En las horas que precedieron al discurso de la Presidenta, no fueron pocas las repercusiones de la votación ocurrida el miércoles por la noche en el Senado. En las ediciones matutinas, el periodismo gráfico especuló acerca de la razón por la cual la bancada del Frente Para la Victoria y sus aliados habían decidido dar quórum para una votación con un resultado, cuando menos, incierto. Y, también, formularon hipótesis sobre las intenciones del oficialismo al otorgarle al vicepresidente Julio Cobos, otra vez, un papel protagónico en la resolución de un debate con obvia repercusión social.
Así lo expresó Marcelo Helfgot, desde las páginas de Clarín: “El oficialismo pudo haber negado el quórum, como tantas otras veces. O impedir que Julio Cobos volviera a capitalizar la aprobación de un proyecto de alto impacto social, como el del 82% móvil, apartando del recinto a uno de los suyos cuando el empate estaba cantado y eso significaba una derrota segura. Sugestivamente, no incursionó en ninguno de los dos caminos”.
Dejemos de lado la especulación acerca de la decisión oficial de forzar la resolución de este entuerto en un escenario de baja repercusión, ante el impacto mediático del rescate de los mineros chilenos que ascendían en una cápsula. Retenemos sí, como plausible, la hipótesis de que el kirchnerismo procuró “colgarle a Cobos y al resto de la oposición el mote de irresponsables que procuran desfinanciar al Estado”. Y, de rebote, darle “nueva visibilidad a Cobos, que estaba en franco declive, para entorpecer la interna del principal partido de oposición, la UCR, donde se venía afirmando la figura de Ricardo Alfonsín”.
En la misma línea interpretativa, el diario La Nación publicó con la firma de Iván Ruiz, una nota donde se señala: “Este nuevo desempate puede ser un guiño para el vicepresidente, que vuelve a tomar protagonismo, cuando Ricardo Alfonsín parecía sacar una ventaja en las encuestas”. Y agrega: “Según informa La Nación, el jefe del oficialismo en el Senado, Miguel Angel Pichetto, contaba con precisas instrucciones de Cristina Kirchner para obligar a Cobos a desempatar”.
Coincidentemente, el diario Página/12 publicó una nota firmada por Sebastián Abrevaya, donde se afirmaba: “Pocos minutos antes de la votación y como un regalo de medianoche, Pichetto le adelantaba ayer al vicepresidente que el oficialismo había decidido, como en el caso de la Resolución 125, darle el lugar de decidir la suerte del 82 por ciento móvil. ‘Probablemente tenga que volver a desempatar. Es una votación que va a afectar al gobierno nacional y provocar un fuerte daño a la credibilidad económica’ le advirtió”.
En fin, Cobos hizo lo suyo, jugó el juego que más le gusta, traicionó a Cristina, y recuperó una centralidad (precaria, si se quiere) en el paisaje mediático. Como es sabido, Cristina durante el día de ayer lo definió como un “okupa” en su cargo; Aníbal Fernández lo acusó, lisa y llanamente de traidor; y Amado Boudou, de irresponsable, entre otras tantas lindezas. Lo cierto es que en el ambiente comunicacional sobrevoló el recuerdo del voto “no positivo” en los días de la discusión de la Resolución 125. Y Cobos, mal o bien, fue otra vez convidado al centro de la escena.
En ese marco se dio este interesante intercambio en el programa “Código Político”, emitido ayer por la noche, por la señal “ultra opositora” TN.
Julio Blanck: El Gobierno, o el kirchnerismo en el Senado, le hizo un favor bárbaro a Cobos, que es su oponente en la interna, porque le dejaron desempatar anoche el tema de las jubilaciones… A ver, a Cobos, desde aquel voto “no positivo” le había costado encontrar protagonismo, anoche se lo dieron otra vez, y lo aprovechó…
Ricardo Alfonsín: No me van a creer. Yo creo que cuanto más fuertes lleguen los candidatos del partido, mejor. Así que no me preocupa eso, sinceramente, no me preocupa. No es tampoco que uno sea presuntuoso, pero no me preocupa eso. Vamos a discutir ideas, proyectos, programas… Algunas diferencias puede haber entre nosotros, y tendrán que ser los afiliados y los independientes los que decidan.

En fin, el Gobierno decidió construir a su adversario, en esta ocasión, como en tantas otras veces antes. Una opción política, claro. Que algunos opositores de derecha, que siempre se suponen más sabios, ironizaron. El kirchnerismo, esa manga de boludos, decidió poner en primer plano a “La armada Brancaleone” y a su jugador decisivo en esta escena (Julio Cleto Cobos) para marcar a fuego el juego perverso de la oposición. Y decidió, también, poner la cara ante la sociedad vetando una ley que apuntaba al corazón de la sustentabilidad del sistema previsional de nuestro país. Y, de paso, sembrar desorden en la interna del radicalismo. ¡Qué boludos!

viernes, 8 de octubre de 2010

¡Y dále con Lanata!

Condenado al ostracismo, conduciendo un programa nocturno en una señal marginal (canal 26), en un horario donde compiten los “tanques” de la televisión abierta, Jorge Lanata la tenía muy difícil a la hora de encontrar, no sólo un público propio, sino algún “rebote”, algún espacio de incidencia, alguna mención en la corriente principal de la comunicación masiva.
Sin embargo, en los últimos días, Lanata, un exaltado decadente que quiere hacerse oír desde la periferia comunicacional, se ha visto favorecido por un inesperado aliado en su intento por hacerse visible y participar del debate político y adquirir algún simulacro de autoridad. En efecto, sorprendentemente, 6-7-8 decidió acudir en su ayuda y construirlo como un adversario de fuste. Una y otra vez, el programa de la TV pública reitera la ostensible mutación en las opiniones de Lanata, a lo largo de las sucesivas ediciones, convirtiéndolo en un protagonista, en apariencia ineludible.
En la edición de ayer, 6-7-8 difundió un informe acerca de las repercusiones de un artículo del diario El País, de España, titulado: “Maradona como metáfora argentina”, presentándolo bajo el título/zócalo “Lanata a la derecha de Feinmann… (Eduardo)”. Digamos, el propósito de este tramo del programa no fue cuestionar ese artículo bizarro, someterlo a crítica, sino ¡dejar sentada la coincidencia en las posiciones de Feinmann y Lanata! O sea, un abrazo en el barro de los luchadores de lo peor.
Después, señalaron la común aversión de Lanata y Feinmann sobre cualquier reconocimiento a la figura de Ernesto “Che” Guevara, y su crítica coincidente a la toma de colegios. Y, finalmente, el informe reiteró el “hit” denuncista sobre Lanata, que se resume en la contraposición de dos declaraciones. Lanata dice en 2003: “Yo creo que los asuntos del pasado siguen existiendo porque nunca hubo justicia. O sea, no creo que los asuntos del pasado sean pasado. Hasta que no haya justicia en serio, la grieta sigue abierta”. Y, luego, su sospechosa "actualización", en 2010. Dice Lanata: “Me tienen harto con la dictadura. ¡Algo que pasó hace 34 años!”.
Un apunte al paso. ¿No parece débil argumentar que, tanto Martín Caparrós como el propio Lanata eran defensores de la “memoria” cuando habían publicado sendos libros sobre la historia argentina? ¿Se trataba sólo de un afán comercial/editorial? ¿No resulta esto una chicana barata? Nos parece que una discusión acerca del papel que cumplen hoy algunos periodistas que, tiempo atrás, fueron clasificados como “progresistas” (¿qué será eso?) no admite semejante reduccionismo.
Pero, sigamos. Y aquí viene a cuento reivindicar al tan cuestionado Orlando Barone, porque él sí enfocó su crítica sobre el artículo del diario El País y su asombrosa difusión en los medios argentinos. Y porque, también, se declaró en rebeldía respecto del tratamiento sesgado de la producción de 6-7-8.
Dijo Barone: “No sé si nos estamos excediendo en poner algún personaje allí, siempre como protagonista. Como si su voz tuviera importancia. Me parece a veces importante reducir la importancia del mensaje. Porque si no, le estamos dando, a lo mejor, un escenario que no se merece. Hay cierta altura donde la decadencia debe decaer sola”.
Y sí, tiene razón Barone. Porque el “agite” que ha hecho PPT de la figura de Lanata, no hace sino favorecerlo, resucitarlo. Basta ver cuántas intervenciones en los blogs ha merecido, cuántas discusiones, a favor y en contra. El problema es que 6-7-8 se encapsula y discute con cualquiera que le “toma su palabra”, y se equivoca. Lanata no vale la pena.

martes, 5 de octubre de 2010

6-7-8 nos afana y ¡nadie hace nada!

Es así, otro ataque a la patria bloguera. Esta vez, no fue un golpe del Grupo Clarín, sino de una colateral del kirchnerismo "totalitario". La productora Pensado Para Televisión (que ya se verá, no piensa mucho, sino simplemente afana), hizo suyo un señalamiento nuestro, publicado a las 3:18 AM del domingo 3 de octubre (trasnochados, ¿vio?). ¡Je, pavada de anticipación! Allí descubrimos con nuestra habitual perspicacia (?) que el portal brasileño Carta Maior formulaba una débil denuncia acerca de la distorsión informativa que Eleonora Gosman, corresponsal del Grupo Clarín en San Pablo, hacía al publicar una entrevista al presidente Lula da Silva, donde ella no había estado presente.
Aclaremos: a la hora de nuestra publicación, no estaba asequible la versión digital de Página/12, que puso esa entrevista en tapa. Nosotros hicimos una traducción precaria, y una comparación entre la versión original (publicada en Carta Maior, en portugués) y el producto manoseado por Gosman en la página digital de Clarín, el sábado 2 de octubre. Y, como se debe, con “actitud bloguera” editorializamos “fuertemente en contra” de la manipulación informativa (cuestión que, obviamente, Página/12 no registró).
Dijimos al respecto varias “cositas”. Una, que Gosman “expurgó” del texto “aquello que no convenía a la línea editorial de la empresa para la cual trabaja”. La segunda, como remate de nuestra humilde intervención: “En fin, una obviedad, a esta altura: si querés informarte, no leas Clarín”. (¡Nos copiaron hasta las comas!). (Ver nuestro post anterior)
Sucede que a 6-7-8 le resultó útil este post de “Dame tu palabra” y lo reprodujo textualmente, sin citar la fuente, ni en la presentación del informe ni en su remate, sobre la venalidad y partidismo del periodismo dominante, tanto brasileño como argentino.
Lo curioso es que algún panelista se manifestó asombrado acerca del fuerte cuestionamiento de Carta Maior respecto de la manipulación de Clarín. Pero no era el sitio digital brasileño, ¡éramos nosotros! Lo que 6-7-8 realmente difundió, fue textualmente nuestro artículo, que incluso difiere respecto de la traducción ofrecida por Página/12 en el reportaje a Lula.
Todo bien, si suma a la política comunicacional del “tanque” televisivo 6-7-8, tan afín a nuestras expectativas, pero, ¿cuesta tanto darnos el crédito, no sólo a nosotros, sino a los blogs, en general? ¿Cuesta tanto aceptar que los blogs más pequeños somos también “fuentes” alternativas respecto del periodismo hegemónico? En fin, la guerrilla informativa sigue: ¡Hasta la victoria Gvirtz!

PD.: Véase este interesante (y ético) registro del internauta ezesolares en Taringa!

domingo, 3 de octubre de 2010

En Brasil también se dieron cuenta: ¡Clarín miente!

Expurgar: Quitar lo considerado como no conveniente de algún escrito.
Fuente: Diccionario Clarín. AGEA S.A. 2003.

Sucede así. La corresponsal de Clarín en San Pablo, Eleonora Gosman, publicó ayer en la página digital del multimedio una nota referida a las opiniones del presidente de Brasil Lula da Silva sobre el papel de los medios en la construcción de la opinión pública, entre otras cosas. Según entendemos, Gosman “expurgó” aquello que no convenía a la línea editorial de la empresa para la cual trabaja.
Leemos (y traducimos con imperfecciones) esta nota del portal Carta Maior, de Brasil. Bajo el título "Clarín repercute entrevista de Lula à Carta Maior", el sitio brasileño señala: "El diario argentino Clarín 'rebota' este sábado la entrevista que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva concedió a Carta Maior. El artículo firmado por Eleonora Gosman, corresponsal de ese diario en San Paulo, aparece destacado en la página web del diario argentino enfatizando las declaraciones de Lula sobre los medios de comunicación. En la guerra contra el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, Clarín trató de seleccionar algunas de las declaraciones del presidente de Brasil, sobre el tema: Lula dice que gracias a la libertad de prensa "llegué donde llegué"- destaca el título de la nota. El texto también refiere que participaron en la entrevista "dos medios latinoamericanos", sin mencionar que uno de ellos es su competidor Página/12 (el otro fue el periódico mexicano La Jornada). En la selección de las declaraciones de Lula, Clarín dejó de lado las reflexiones del presidente brasileño sobre los problemas de los medios latinoamericanos (la similitud del tipo de cobertura realizada por los grandes medios de comunicación de la región) y también en los Estados Unidos, donde el presidente Barack Obama ha caracterizado a la cadena Fox como un partido de la oposición y no como un vehículo de comunicación".Luego de esta denuncia acerca de la sesgada "selección" operada por Gosman, Carta Maior, bajo el subtítulo "Crímenes durante la dictadura", ofrece un relato del conflicto que el Gobierno argentino mantiene con la prensa hegemónica. Se refiere allí a la difusión del informe sobre Papel Prensa, presentado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, dando cuenta de la complicidad de Clarín, La Nación y La Razón con la dictadura militar. Y, también, de la polémica que involucra a la propietaria del Grupo Clarín, Ernestina Herrera de Noble, por la supuesta apropiación de hijos de desparecidos.
En la versión de Clarín, Gosman señala: "El presidente agregó que no tiene mucho de qué quejarse sobre los medios de su país". En realidad, Lula dice: "Mirá, el día en que la prensa brasileña resuelva divulgar la revolución que ocurrió en Brasil, el pueblo se va a dar cuenta de por qué el gobierno aparece con un 80% de aprobación en las encuestas. No es Lula, es el gobierno que aparece con una aprobación del 80% en el octavo año de mandato. ¿Cuál es el fenómeno? Porque no depende de la prensa. Si dependiera de la prensa, yo tendría 10, menos 10 de aprobación. Yo estaría debiendo puntos. Es decir, ¿cuál es el fenómeno? El fenómeno es que las cosas están llegando a las manos del pueblo. El pueblo está recibiendo los beneficios, el pueblo está viendo que las cosas suceden. Y quien no habló no fue parte de la historia de ese período. Creo que fue el gran cambio que veo desde 2003 hasta 2010.
Carmen Lira / La Jornada: Usted acaba de mencionar algo muy interesante para los mexicanos. Hicimos cosas que la prensa algún día dará a conocer. ¿No fue divulgado por el gobierno?
Presidente Lula: Mirá, aquí en Brasil, hay un debate muy interesante. Me he dado cuenta de que la Argentina tiene el mismo debate, y que los países de América Latina tienen el mismo debate. Y me he dado cuenta que incluso Obama, cuando asumió el cargo, dijo que Fox no actuó como un medio de comunicación sino como un partido político. Bueno, hablo con muchos dirigentes de todo el mundo. Todo el mundo se queja. No me quejo mucho de la prensa porque yo creo que llegué a donde llegué por causa de la prensa. Ella contribuyó mucho para que yo llegase a donde llegué. Por lo tanto, soy un defensor declarado de la libertad de expresión y la democracia. Ahora, algunas personas confunden la democracia, la libertad de comunicación con actitudes extemporáneas. Y no sé si es una cuestión mundial, o que no hay buenas noticias o que tal vez lo que venda diarios sea sólo el escándalo".
Y después dice Gosman: "Cuestionado sobre su relación con los grandes grupos mediáticos de su país, el presidente recordó que nunca almorzó o cenó con los dueños de diarios, revistas o emisoras. 'Mantuve con ellos una relación democrática, respetuosa, que partió de entender el papel de ellos al mismo tiempo que yo quería que ellos entendieran el mío'".
Qué dijo Lula: "Mirá, yo voy a terminar mi mandato sin haber tenido jamás un almuerzo con el titular de ningún periódico, ningún propietario de la televisión, ningún propietario de una revista durante mi mandato. Mantuve con ellos una relación democrática, respetuosa, entendiendo el papel de ellos y queriendo que ellos entendiesen mi papel. Creo que muchas veces el pueblo sabe las cosas buenas que suceden en este país porque nosotros divulgamos a través de la publicidad oficial, porque Internet divulga, los blogs divulgan, el blog del Planalto divulga... Pero a veces, si dependiera de determinados medios de comunicación, simplemente no hablan sobre el asunto. Algunos incluso dicen 'mirá, no tenemos ningún interés en hacer la cobertura oficial de la inauguración de cosas'. Usted sabe, no tiene ningún interés. Puede ser cierto... El hecho concreto es que creo que si el pueblo fuese mejor informado, el pueblo sabría más cosas y las personas podrían hacer un mejor juicio de valor acerca de las cosas. Así que para mí, el arte de la democracia es esta, que las personas tengan seguridad en la calidad de la información, en la fluidez de la información y la neutralidad de la información. Aquellos que siguen la política brasileña en ese momento se darán cuenta de que sería mucho más fácil si algunos medios de comunicación asumiesen, categóricamente, su compromiso partidista. Y entonces sabríamos quién es quién, pero no es así como funciona en Brasil. Al parecer, todos los medios son independientes, pero basta sólo ver los titulares para comprender que la independencia termina donde comienza el comercio".
En fin, una obviedad, a esta altura: si querés informarte, no leas Clarín.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Marcelo Zlotogwiazda y el derrumbe del periodismo "independiente".

El periodismo argentino funciona, como diría Roland Barthes, según un “sistema de relaciones, de apoyos y modelos”, anteriormente pacífico y actualmente en conflicto, gracias a “6-7-8”, entre otras cosas. Es decir, un “campo intelectual” (aquí remitimos a Pierre Bourdieu) muy activo y polémico donde se disputan posiciones de poder y legitimación.
Esto viene a cuento para comentar la actitud indignada que exhibió ayer Marcelo Zlotogwiazda, en la emisión del programa “Palabras más, palabras menos”, que se difunde por la señal de cable Todo Noticias, propiedad del muy hegemónico y abusivo Grupo Clarín.
¿Cuál fue el motivo de esa indignación o reclamo narcisista? Algo muy simple, y primario. La exhibición, durante la marcha a favor de la plena aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, ayer por la tarde frente al edificio de Tribunales, de pancartas que señalaban como periodistas serviles a sus patronales a varios profesionales, empleados de la corporación mediática (Clarín y sus colaterales). Entre ellos, al propio Zlotogwiazda. Los carteles en cuestión mostraban una leyenda, calada en rojo: “Empleado del mes”. Debajo, una foto de los periodistas “escrachados” con un “globito” -al mejor estilo de las historietas- que decía “Yo estoy a favor de los monopolios”. Estos carteles estaban firmados por la Juventud Peronista de la Provincia de Buenos Aires.
Al respecto, en la presentación del programa, Zlotogwiazda señaló, en su réplica:
“No es la primera vez. Hubo una primera vez, en una marcha convocada por el programa hiper oficialista ‘6-7-8‘, donde algunos periodistas aparecían con un dólar como mordaza en la boca. Hubo en un segundo caso afiches donde decía ‘¿se puede ser periodista independiente trabajando para una apropiadora de bebés?’, y ahí aparecíamos periodistas del Grupo Clarín. Y hoy como tercera vez. Pensar, decir, creer y escribir que Ernesto (Tenembaum), Jorge (Lanata), Nelson (Castro); personas que yo conozco personalmente, y mucho, están a favor de los monopolios, ¡es un dislate! Es descabellado, basta repasar archivos”.
Tal vez el periodista Zlotogwiazda no se haya manifestado nunca a favor de los monopolios en general, pero nos gustaría que nos muestre un archivo reciente donde él se manifieste críticamente respecto de la abusiva posición dominante del Grupo Clarín, y de sus maniobras corporativas en contra de la Ley de Medios aprobada por el Parlamento nacional.
Y sigue Zloto: 
“No quiero detenerme en ese detalle, de los dos (que yo estoy a favor de los monopolios) sino en el otro, en el ‘empleado del mes’. Lo mismo que en el primer caso, con el dólar de la mordaza, el mensaje es: ‘Dicen lo que dicen, opinan lo que opinan, informan lo que informan, tienen el enfoque que tienen, porque alguien les paga’. Lo que están diciendo, casi literalmente, es: ‘somos mercenarios’. Se desprende de todo eso una idea de que alguien no puede pensar distinto al Gobierno. Y llámese ese distinto muy distinto, poco distinto, con algún matiz, totalmente distinto, que no sea con honestidad. Es un pensamiento realmente intolerante creer que alguien no pueda tener diferencias con el Gobierno, muchas, pocas o totales, que no sean auténticas, que no sean por convicción”.
Un aparte. Algunos años atrás (en 2003), Héctor D’Amico, secretario general de redacción de La Nación, señaló al ser entrevistado: “Katharine Graham, la dueña y directora del Washington Post, quien dirigía ese diario durante el Watergate, me dijo una frase de la que no me voy a olvidar: ‘El deber de todo periodista es elegir muy bien a su patrón. Eso le va a evitar muchas complicaciones en la vida’. (*)
Y este es el problema de Zlotogwiazda: no eligió bien (o sí, quizás) a su patrón. Queda claro que él no puede pensar distinto, que no puede tener diferencias con Clarín. Sería interesante que este periodista, que se presume autónomo, revisara cuáles son las manifestaciones de pluralismo en TN, cuánta diversidad informativa subsiste allí, o en los diferentes medios que responden al Grupo Clarín. Por caso, ¿qué hace, dice, informa Clarín respecto de la investigación sobre la identidad de los hijos adoptados/apropiados por la señora Ernestina Herrera de Noble? ¿Qué informa Clarín acerca del escándalo producido en ocasión de la búsqueda de muestras para cotejar el ADN de Marcela y Felipe? ¿Qué hizo Clarín ayer mismo con el pedido de las Abuelas de Plaza de Mayo acerca de la reserva de identidad del nieto recuperado 102? ¿Qué hace Zlotogwiazda con estas cuestiones en su programa emitido por TN?
Hace silencio y prefiere aguijonear sobre el discurso exaltado (y quizás contraproducente) de Hebe de Bonafini durante el acto de ayer. Toma partido, y se ensucia, y se compromete con la causa de sus patrones, y punto. Él, Marcelo Zlotogwiazda, es parte de esa maquinaria constructora de hegemonía cultural a favor del establishment, es un soldado más de esa fábrica de mentiras travestidas bajo el rubro “periodismo independiente”. Que se haga cargo.

(*) “Los que hacen la noticia. Periodismo, información y poder”. Stella Martini y Lila Luchessi. Editorial Biblos. 2003.

martes, 28 de septiembre de 2010

Gerardo Morales sabrá el año que viene lo que piensa

Es bien sabido que el senador Gerardo Morales (UCR Jujuy) es un “hábil declarante”, que suele tirar la pelota afuera cuando no le conviene seguir con la discusión (véase al respecto, su vergonzoso papel en la polémica con Amado Boudou, sobre política económica y social en épocas del gobierno de Fernando De la Rúa). Ayer, Gerardo Rozin, en su programa “Esta noche”, que se emite por C5N, le hizo preguntas acerca del futuro del radicalismo, sobre el porvenir de la ley de medios audiovisuales y, en particular, sobre el programa estatal Fútbol para Todos. Y en este punto, el senador Morales volvió a hacer “jueguito para la tribuna” y a postergar (en apariencia) sus tomas de posición hasta el año próximo. Aquí va la respuesta de Morales, el indeciso.
Morales: Están gastando mil millones de pesos anuales. Nosotros hicimos un buen informe. Todavía estamos esperando que la AFA nos conteste qué está haciendo con los 600 millones de pesos que le transfiere el Estado. Pero digo, lo que me parece lamentable es que se utilice ese medio y plata oficial para convocar a una marcha e ir a presionar a la Corte. Me parece que el Gobierno se excede y eso a la larga se paga, porque todo lo que sube mal, baja mal.
Rozin: ¿Vos sos crítico de la utilización de ese espacio para cuestiones políticas como la marcha (en defensa de la ley de medios) o sos crítico del Fútbol para Todos en general?
Morales: En general me parece que es muy ineficiente…
Rozin: ¿Si ustedes asumieran, mantendrían el Fútbol para Todos?
Morales: No. No sé. Vamos a ver. Vamos a tener plan de gobierno sobre junio del año que viene. No sé, pero buscaríamos que no deje de ser negocio algo que es negocio. No puede ser que el Estado se meta y pierda plata, pierde mil millones de pesos, y el fútbol que es un gran negocio deje de serlo, y el Estado tiene que poner, ¿no? Me parece que podría haber una variante de fútbol gratis pero donde el Estado no ponga tanta plata y no se utilice (como) propaganda para una facción”.
De aquí se deduce que:
a) Morales está en contra de la ley de servicios de comunicación audiovisual aprobada por abrumadora mayoría en el Parlamento.
b) Morales entiende que una movilización popular es una “presión” y no una manifestación de apoyo a una ley vigente pero obstaculizada en su aplicación.
c) Morales quiere que el fútbol vuelva a ser un negocio, como lo era antes, cuando estaba en manos privadas. O sea, lo quiere volver a privatizar, aunque no lo diga abiertamente. Porque el gran negocio del fútbol era cobrarle un plus a los abonados del cable (privado).
d) Morales cuestiona el direccionamiento de la publicidad estatal hacia un programa público (por caso, Fútbol para Todos). Habría que advertirle que no se trata de “propaganda para una facción” sino, simplemente, publicidad de las políticas públicas en emisiones con buen rating.
En fin, el senador Morales no tiene nada nuevo para ofrecernos. Si Ricardo Alfonsín -su candidato estrella- llegara a presidir este bendito país, sólo podríamos esperar retrocesos en el papel del Estado en la vida económica y social. Neoliberalismo otra vez, ni siquiera el fútbol gratis nos quedaría. Y ni qué hablar del resto, ¿no?